En silencio.
Nunca fue
correspondido
nuestro amor.
De alguien más, quizá
el miedo,
serán tus besos.
Lloverán estrellas
y lloraré deseos.
Y cavaré un pozo,
hueco y húmedo,
donde mis uñas
sangren el amor que nos debimos.
Y tu alma, tranquila
y sincera
esperará la primavera.
Y la mía, en
sollozos,
se arrojará a la
cuerda.
Y mis ojos ciegos
que te imaginan con
otro
con tu correspondido,
tu adorado
en ese cruel acto de
saberse amados.
Te amaré en versos,
poemas y canciones.
Te amaré callado.
Sólo voy a darle de
comer a las palomas,
Y, con su arrullo,
dolerte.
Inédito.
Foto: Jan Saudek, "Baile en el Paraiso"
(por el estilo, debe ser de entre 1986-1990)